Los investigadores rusos han asegurado que las pruebas genéticas realizadas a los supuestos restos del zar Nicolás II y su mujer, exhumados en septiembre en la catedral de San Petersburgo, han confirmado que su autenticidad, lo que acerca la posible reunificación de la familia Romanov.
Nicolás II, su esposa Alejandra, sus cuatro hijas –las grandes duquesas Anastasia, María, Olga y Tatiana– y su hijo –el zarevich Alexei– fueron ejecutados en la localidad de Ekaterimburgo junto a cuatro trabajadores de la Casa Real en 1918.
El caso quedó cerrado en 1998 después de que los análisis de ADN confirmaran que los restos encontrados en una fosa común en los Urales en 1991 correspondían al último zar ruso. Sin embargo, estas pruebas no satisficieron a miembros de la Iglesia Ortodoxa, ya que los restos de Alexei y María fueron localizados en 2007 en un lugar diferente. La Iglesia exigía aclarar las identidades antes de enterrar a los hijos.
Expertos forenses del Comité de Investigación exhumaron los restos este año para realizar unos nuevos análisis y la institución ha confirmado la autenticidad de los restos. «Estas muestras revelan heteroplasmia, una rara mutación genética presente en las muestras previas de Nicolás II», ha informado el Comité.
Las autoridades aún prevén realizar más pruebas para llegar a una «conclusión final» plenamente «fiable». El mes pasado, ya adelantaron que prevén exhumar los restos del zar Alejandro III, padre de Nicolás II, en el marco de las mismas investigaciones.
www.abc.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario