Giant George, el perro más grande del mundo, ha
muerto en su casa de Tucson, Arizona, un mes antes de octavo cumpleaños.
El gran danés falleció el pasado 17 de octubre, rodeado por sus
propietarios, Dave y Christie Nasser, quienes publicaron un sentido
homenaje en Facebook.
“Es con gran tristeza que anunciamos que Giant George murió anoche.
George falleció pacíficamente rodeado de sus seres queridos, un mes
antes de su octavo cumpleaños. Apreciamos el amor y apoyo que le han
dado a Giant George en los últimos años. Esperamos poder honrar su
espíritu, continuando sus obras de caridad”, se lee en la publicación.
Giant
George medía 2,1 metros de largo desde la nariz hasta la cola, 1 metro
desde el piso hasta su hombro y pesaba más de 110 kilogramos. Era el más
pequeño de su camada al nacer, pero su increíble desarrollo lo consagró
en 2010 como el perro más grande del mundo, según el libro de los Récords Guinness.
La
historia de George junto a los Nasser empezó cuando este era un
cachorro de siete meses de edad –nació en una camada de 13 en Oregon–.
“Después de cinco meses todavía actuaba como un perrito, persiguiendo su
cola, (…) pero ya era de tamaño de un labrador totalmente crecido”,
explicó en su momento Dave.
"Su tamaño no pasó desapercibido.
Nuestro parque local tenía una sección para los perritos, pero estábamos
intimidados por los otros propietarios, que estaban asustados por si
George haría daño a sus perros", señaló Dave.
Hasta sus últimos
días, George se divertía persiguiendo a los repartidores y comiendo su
plato favorito: el pollo frito. Descansa en paz, Giant George.
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