Si alguien tiene más de 1 millón de dólares podrá convertirse en el mítico Sam
de Casablanca y tocar el piano del café de Rick otra vez. Sotheby's
subasta el próximo día 14 el piano que inmortalizó As time goes by, una
de las canciones más recordadas de la historia del cine.
Coincidiendo con el 70 aniversario del estreno de la película,
Sothebys subasta el instrumento que podría alcanzar la astronómica cifra
de 1,2 millones de dólares. De hecho no es la primera vez que el piano
pasa por la casa de subastas, según recuerda The Guardian.
En 1988 ya fue subastado y un comprador japonés se lo llevó a casa
por la nada desdeñable cifra de 154.000 dólares, unos 120.000 euros.
Ahora, ese comprador nipón es el que vuelve a subastar el piano aunque
por mucho más dinero del que desembolsó hace casi 25 años, ya que se
estima que es el precio de salida rondará los 800.000 dólares, unos
617.000 euros.
El piano no aparece solamente en la escena en la que Ingrid Bergman le pide a Sam
que toque As Time Goes By, ya que también está en plano en un flashback
ubicado en París. El instrumento es el mismo que suena en La Belle
Aurore, el establecimiento parisino en el que Rick e Isa viven el
principio de su amor.
Mientras los personajes de Humphrey Bogart e Ingrid Bergman se apoyan en el piano, Sam -el actor y cantante Dooley Wilson- toca la canción a la vez que las tropas alemanas hacen su entrada en la ciudad del Sena.
Los más de 1,2 millones de dólares que podría alcanzar la pieza se
convertirán en un nuevo hito en las subastas de Sotheby's. El record lo
ostenta el mítico vestido blanco que Marilyn Monroe
lucía sobre una salida de aire del metro en La Tentación vive arriba,
que se vendió por la astronómica cifra de 4,6 millones de dólares.
http://www.europapress.es
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