Ni la mente de Lovecraft habría sido capaz de crear a una criatura semejante.
Todos tenemos la imagen de las mariposas como unas criaturas gráciles y de hermosos colores, a las que hemos convertido en el símbolo de la felicidad y que son, por encima de todo, vegetarianas.
Bueno, la verdad es que, aunque lo son la mayoría de ellas, es una impresión equivocada, ya que una pequeña proporción de ellas son afitófagas, o lo que es lo mismo, se alimentan de otro tipo de nutrientes diferentes a las plantas.
Y precisamente, una reciente investigación realizada por Gerard Talavera, investigador del Instituto de Biología Evolutiva de la universidad Pompeu Fabra de Barcelona (y publicado en la revista Evolution), nos presenta a una nueva variedad de mariposa que come carne.
Se trata de una de las casi 140 subespecies de la familia Miletinae, una mariposa depredadora que parasita a las hormigas para poder tener acceso a sus presas, que son básicamente hemípteros (chinches, pulgones, cigarras...).
La peculiaridad es que esta dieta solo la sigue en su etapa de larva. Se considera que el total de las variedades de mariposas carnívoras no supera el 1%, lo que equivale a unas trescientas especies.
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