El centro de detención de Guantánamo es una prisión de alta seguridad situada en una base naval que Estados Unidos tiene en la bahía de Guantánamo, Cuba. Desde 2002, las autoridades estadounidenses la han usado como centro de detención para detenidos acusados de terrorismo, la mayoría de ellos capturados en Afganistán durante la invasión de este país que siguió a los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Guantánamo es sólo una parte del sistema de centros de detención que mantiene Estados Unidos en el exterior, y que incluye cárceles en Iraq y Afganistán. Decenas de detenidos han sido llevados a Guantánamo desde otros centros de detención secretos de la CIA.
Fue acondicionada como centro de detención tras la invasión de Afganistán, a finales de 2001. Dos días después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, el Congreso de Estados Unidos aprobó una resolución por la que se otorgaba al presidente George W. Bush una autorización sin precedentes para emplear la fuerza contra "naciones, organizaciones e individuos" que, según su criterio, estuviesen relacionados en cualquier modo con los atentados o con actos futuros de terrorismo internacional.
El 17 de septiembre, el presidente Bush firmó un memorando en el que autorizaba a la CIA a instalar centros de detención fuera del territorio de Estados Unidos. Este documento tiene carácter secreto.
En noviembre de 2001, George W. Bush firmó una orden ejecutiva en materia militar sobre "Detención, tratamiento y enjuiciamiento de ciertos extranjeros en la guerra contra el terrorismo", por la que autorizó al Pentágono a mantener a ciudadanos no estadounidenses bajo custodia indefinida sin cargos. Los 20 primeros prisioneros llegaron el 11 de enero de 2002.
Situada junto a la bahía de Guantánamo, a 920 kilómetros al sureste de La Habana, tiene 117,6 kilómetros cuadrados, de los que sólo 49,4 son de tierra firme, y una línea costera de 17,5 kilómetros. Está cercada por una alambrada electrificada de tres metros de altura. Tiene una dotación permanente de 435 marines que conviven con otros militares y civiles estadounidenses. La población total se cifra en unas 8.500 personas.
Los prisioneros están distribuidos en cuatro campos rodeados de alambradas de malla metálica, donde pasan las 24 horas del día. Cada bloque tiene un total de 48 celdas. Tienen algo de intimidad y se les permite realizar media hora de ejercicio diario -a algunos sólo tres días a la semana- en un campo de deportes que mide 7,6 por 9,1 metros.
Reciben visitas de la Cruz Roja, organización que se encarga también de llevarles las cartas de sus familias. Oficiales estadounidenses inspeccionan el contenido de toda la correspondencia. Los prisioneros no pueden recibir visitas de sus familiares ni se les permitía, hablar con ellos por teléfono de forma regular. Las luces de los pasillos y las instalaciones están encendidas noche y día.
Amnistía Internacional calcula que el 80% de los detenidos están recluidos en régimen de aislamiento en el Campo 5, el Campo 6 o el Campo llamado "Eco". El Campo 6se construyó para albergar a 178 detenidos. Es la instalación donde las condiciones son más severas. Los detenidos están confinados durante un mínimo de 22 horas al día en celdas individuales de acero sin ventanas al exterior.
Estados Unidos los considera "combatientes enemigos ilegales" -la mayoría están acusados de pertenecer a los talibanes o a Al Qaeda, y no prisioneros de guerra, por lo que entiende que no tiene por qué aplicarles la Convención de Ginebra y, por tanto, que puede retenerlos indefinidamente sin juicio y sin derecho a la representación de un abogado, algo que ha sido criticado por gobiernos y organizaciones de derechos humanos de todo el mundo.
Los juicios a los presos de Guantánamo son llevados a término por tribunales militares creados en la propia base al amparo del acta de poderes especiales de 2006. Están formados por entre cinco y doce oficiales de las fuerzas armadas estadounidenses. Un juez militar calificado preside la sesión. Para lograr una condena, al menos dos tercios de los miembros tienen que estar a favor, pero si se trata de una sentencia de muerte -que puede solicitarse si llega a probarse que alguien murió por culpa del acusado-, la decisión tiene que ser unánime y ratificada en última instancia por el presidente de los Estados Unidos.
Guantánamo es sólo una parte del sistema de centros de detención que mantiene Estados Unidos en el exterior, y que incluye cárceles en Iraq y Afganistán. Decenas de detenidos han sido llevados a Guantánamo desde otros centros de detención secretos de la CIA.
Fue acondicionada como centro de detención tras la invasión de Afganistán, a finales de 2001. Dos días después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, el Congreso de Estados Unidos aprobó una resolución por la que se otorgaba al presidente George W. Bush una autorización sin precedentes para emplear la fuerza contra "naciones, organizaciones e individuos" que, según su criterio, estuviesen relacionados en cualquier modo con los atentados o con actos futuros de terrorismo internacional.
El 17 de septiembre, el presidente Bush firmó un memorando en el que autorizaba a la CIA a instalar centros de detención fuera del territorio de Estados Unidos. Este documento tiene carácter secreto.
En noviembre de 2001, George W. Bush firmó una orden ejecutiva en materia militar sobre "Detención, tratamiento y enjuiciamiento de ciertos extranjeros en la guerra contra el terrorismo", por la que autorizó al Pentágono a mantener a ciudadanos no estadounidenses bajo custodia indefinida sin cargos. Los 20 primeros prisioneros llegaron el 11 de enero de 2002.
Situada junto a la bahía de Guantánamo, a 920 kilómetros al sureste de La Habana, tiene 117,6 kilómetros cuadrados, de los que sólo 49,4 son de tierra firme, y una línea costera de 17,5 kilómetros. Está cercada por una alambrada electrificada de tres metros de altura. Tiene una dotación permanente de 435 marines que conviven con otros militares y civiles estadounidenses. La población total se cifra en unas 8.500 personas.
Los prisioneros están distribuidos en cuatro campos rodeados de alambradas de malla metálica, donde pasan las 24 horas del día. Cada bloque tiene un total de 48 celdas. Tienen algo de intimidad y se les permite realizar media hora de ejercicio diario -a algunos sólo tres días a la semana- en un campo de deportes que mide 7,6 por 9,1 metros.
Reciben visitas de la Cruz Roja, organización que se encarga también de llevarles las cartas de sus familias. Oficiales estadounidenses inspeccionan el contenido de toda la correspondencia. Los prisioneros no pueden recibir visitas de sus familiares ni se les permitía, hablar con ellos por teléfono de forma regular. Las luces de los pasillos y las instalaciones están encendidas noche y día.
Amnistía Internacional calcula que el 80% de los detenidos están recluidos en régimen de aislamiento en el Campo 5, el Campo 6 o el Campo llamado "Eco". El Campo 6se construyó para albergar a 178 detenidos. Es la instalación donde las condiciones son más severas. Los detenidos están confinados durante un mínimo de 22 horas al día en celdas individuales de acero sin ventanas al exterior.
Estados Unidos los considera "combatientes enemigos ilegales" -la mayoría están acusados de pertenecer a los talibanes o a Al Qaeda, y no prisioneros de guerra, por lo que entiende que no tiene por qué aplicarles la Convención de Ginebra y, por tanto, que puede retenerlos indefinidamente sin juicio y sin derecho a la representación de un abogado, algo que ha sido criticado por gobiernos y organizaciones de derechos humanos de todo el mundo.
Los juicios a los presos de Guantánamo son llevados a término por tribunales militares creados en la propia base al amparo del acta de poderes especiales de 2006. Están formados por entre cinco y doce oficiales de las fuerzas armadas estadounidenses. Un juez militar calificado preside la sesión. Para lograr una condena, al menos dos tercios de los miembros tienen que estar a favor, pero si se trata de una sentencia de muerte -que puede solicitarse si llega a probarse que alguien murió por culpa del acusado-, la decisión tiene que ser unánime y ratificada en última instancia por el presidente de los Estados Unidos.
dos años se dice que se tardará en cerrarse...la vergüenza yankie...
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo. Vergüenza gringa y de todos los países poderosos que no la detuvieron.
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